El penúltimo día de nuestra ruta por Croacia decidimos pasarlo en la bonita ciudad de Korčula (se pronuncia Korchula), ésta se encuentra en la isla del mismo nombre y para acceder a ella es necesario coger un ferry.
Nosotros accedimos desde Orebic, pero para más info sobre los ferrys mejor que visitéis su página web Jadrolinija o Krilo, depende si vais en coche o desde Dubrovnik directamente.
Si queréis hacer noche os aconsejamos que os alojéis en el centro para tener todo a un paso, podéis hacer una búsqueda rápida en Booking aquí.
Es una ciudad medieval pequeñita y muy coqueta, perderse por sus callejones y disfrutar de cada rincón es indispensable. Se recorre a pie fácilmente ya que toda la ciudad es peatonal, y no es difícil encontrar un sitio dónde comer, pues tiene una amplia oferta de restaurantes repartidos por todo el casco antiguo.
Una de las cosas que más nos gustó es que no está tan explotada turísticamente como Dubrovnik y todavía conserva la esencia que se pierde con la llegada masiva de turistas.
Se dice y se comenta que el gran viajero Marco Polo nació y vivió aquí, aunque este hecho no está del todo demostrado y hay un gran debate sobre si realmente fue aquí o en Venecia.
Lo que sí que está claro es que han sabido sacarle todo el partido a este hecho y actualmente se puede visitar la casa donde (se supone) nació, convertida hoy en día en museo. Además de poder comprar todo tipo de souvenirs sobre el gran viajero.
La catedral de San Marcos es otro de los atractivos turísticos que ver en Korcula. Se puede visitar el campanario desde el que se obtienen unas vistas increíbles de la ciudad, o eso hemos visto en Tripadvisor porque nosotros llegamos tarde y ya estaba cerrado... También se pueden ver algunas de las obras más importantes de Tintoretto.
Los palacios de Abadía y Gabriellis, convertidos hoy en museos, son otro reclamo turístico para ver en Korcula, en ellos se conserva el tesoro y museo de la ciudad respectivamente.
Para nosotros lo más bonito fue recorrer sus calles, te hacen retroceder 500 años atrás a una Korčula que entonces se encontraba bajo el dominio veneciano, cosa que resulta más que notable en su arquitectura.
Un dato curioso de la ciudad es que fue el primer lugar del mundo en abolir la esclavitud, allá por el 1214.
También contemplamos una preciosa puesta de sol desde el puerto y eso que el día no acompañaba demasiado, había llovido y estaba nublado.
Os aconsejamos que os alojéis en el centro para tener todo a un paso, podéis hacer una búsqueda rápida en Booking aquí.
Nos quedamos con ganas de adentrarnos en la isla y descubrir bonitas calas y paisajes.
También nos hubiese gustado visitar el pueblecito de Vela Luka que por lo que habíamos leído es precioso, pero se encuentra justo al otro lado de la isla y no pudimos por falta de tiempo. Queda pendiente para otro futuro viaje a Croacia. 🙂
¡Y hasta aquí nuestro paso por Korcula!
NOTA: Este artículo lo escribimos hace tiempo y es posible que no tenga la calidad que nos gustaría. Estamos en continuo crecimiento y cada día nos esforzamos por hacer artículos de mayor calidad con consejos e información práctica para planificar viajes por libre, esperamos volver pronto a Croacia y actualizar este contenido.
Deja una respuesta